El Comité Supremo para la Organización y el Legado de Qatar ha publicado recientemente estadísticas nunca antes vistas utilizando una nueva herramienta de mapeo satelital a medida, que calcula las distancias y tiempos de viaje entre los ocho estadios que se encuentran actualmente en construcción y/o ampliación, y cuya finalización está prevista para el año 2020.

La definición de las rutas entre estadios está siendo tan minuciosa, que ya se conoce que la menor distancia entre dos de los ocho estadios será de 3,5 millas, y la mayor de 35, lo que asegura que un mismo espectador podrá disfrutar de varios partidos en una sola jornada.

Qatar está pisando el acelerador en la inversión en infraestructuras como parte de los preparativos del país para el torneo del Mundial de Fútbol que se jugará entre el 21 de noviembre y el 18 de diciembrede 2022, y que tendrán continuidad en años posteriores al estar incluidos en un ambicioso documento de desarrollo global del país denominado Visión Nacional 2030.

El plan incluye, entre otras cosas, la construcción de una ‘nueva ciudad’, Lusail City, con una inversión superior a los 45.000 millones de dólares, que albergará el estadio principal de la Copa del Mundo de 2022, el Lusail Stadium, con capacidad para 86.000 personas.

El sector hotelero, ya puntero en el país, se está desarrollando también a ritmo acelerado para llegar en perfectas condiciones a la fecha clave, y ya se conoce que los nuevos hoteles ofrecerán a los aficionados diferentes opciones de alojamiento que se adapten a todos los presupuestos, cubriendo toda la tipología de visitantes esperada en un evento deportivo de esta magnitud.

Las obras del nuevo metro (que previsiblemente se inaugurarán este 2019), el tren ligero, y una red de carreteras ampliada y mejorada respecto a la actual, contribuirán a reducir al mínimo la congestión de las vías urbanas durante el torneo, facilitando los traslados de unos estadios a otros, y a las zonas de ocio y hoteles, con las mayores garantías.

Por otro lado, se está procediendo a la ampliación del Aeropuerto Internacional de Hamad, inaugurado en 2014, para aumentar su capacidad por encima de los 30 millones de visitantes anuales actuales hasta los 50 millones en 2022, para garantizar que el país pueda albergar a los miles de jugadores, aficionados y personal operativo que llegarán con motivo del Mundial.

Para los aficionados, este será el torneo definitivo para vivir la experiencia de los partidos en directo. La naturaleza compacta de la nueva red de infraestructuras implica tiempos de viaje cortos desde el aeropuerto y el alojamiento hasta los parques de aficionados, las atracciones turísticas y, lo que es más importante, las instalaciones de los partidos, lo que permite a los aficionados ver más de dos partidos en directo al día.

Qatar cuenta con una ventaja operativa a nivel mundial, y que está a sólo ocho horas de vuelo para dos tercios de la población mundial. Esto es completamente único en comparación con cualquier otra Copa Mundial de la FIFA, según han destacado los propios organizadores.

La edición 2022 de FIFA World Cup será sin duda un gran torneo para los aficionados y los equipos que viajen a Qatar.

Qatar promete un Mundial de Fútbol innovador: espectacularidad y comodidad a partes iguales