El máximo accionista del CD Tenerife, Rayco García, ha comenzado a construir lo que podría ser uno de los proyectos más ilusionantes de la última década para el conjunto blanquiazul. Con un perfil bajo, mucha discreción y una clara visión, ha dado dos pasos claves: renovar a Álvaro Cervera como entrenador y fichar a una auténtica leyenda del club, Felipe Miñambres, para liderar la dirección deportiva.

Regresa una leyenda: Felipe Miñambres

Rayco tenía un sueño desde que decidió dedicarse al mundo del fútbol: volver a contar en el Tenerife con Felipe Miñambres, un ídolo eterno del Heliodoro Rodríguez López. No solo lo admiró como jugador —por sus goles inolvidables y su histórica participación en el Mundial de 1994 con la camiseta de España—, sino también como gestor deportivo de éxito en clubes como el Rayo Vallecano y el Levante UD.

La llegada de Miñambres no es una contratación más. Supone recuperar la esencia del tinerfeñismo. Basta recordar su gol desde casi medio campo al Olympiacos en la Copa de la UEFA, o su capacidad para conectar con una isla que nunca dejó de verlo como uno de los suyos.

Renovación clave: Álvaro Cervera

En paralelo, el club ha oficializado la renovación de Álvaro Cervera, una decisión muy celebrada por la afición. El técnico, que regresó el pasado mes de diciembre, ha logrado reconectar al equipo con su identidad. Rayco ha apostado por él sin titubeos, dejando claro que la categoría en la que compita el equipo no condicionará el proyecto. La prioridad es la estabilidad, el trabajo a largo plazo y la coherencia institucional.

Un proyecto con alma y cabeza

No ha sido un camino fácil. El proceso ha estado marcado por semanas de trabajo silencioso, críticas externas y decisiones estratégicas tomadas con paciencia. Pero, como ocurre en los grandes proyectos, el tiempo y la fe en una idea sólida terminan marcando la diferencia.

Con la ilusión renovada, la afición del Tenerife puede soñar con un futuro en el que el club recupere su lugar en la élite del fútbol español, respaldado por una dirección comprometida y profundamente conectada con su historia.

«Rayco ha cumplido su sueño… y también el de toda una isla.»